El Masa Real de Guayaba es uno de los postres más antiguos que tengo en mi memoria. Recuerdo las enormes bandejas de este dulce a la hora de la merienda cuando estaba en la escuela primaria, solo que en ese tiempo lo llamábamos “Mata Hambre”, “Ladrillo” o “Tranca Buche”. Calificativos adquiridos debido a su mala calidad o quizás porque era una masa tan densa y pesada que te caía como un bloque en el estómago y llenaba muchísimo. Se hacían muchas burlas sobre este dulce y se empleaba más como proyectil que para comer, ya que los niños lo usaban para lanzárselos unos a otros a modo de diversión. Se puede decir que fue un símbolo de los años 90 en Cuba, siempre presente y sin embargo poco apetecible. Fue una época de grandes escaseces y aun así muchos preferían no merendar que comerse ese “Tranca Buche”.
Ese fue el único Masa Real que yo conocí, sin embargo siempre escuche decir a las personas mayores que antes ese dulce era muy rico y popular, pero para mi generación el Masa Real nada tenia de Realeza, era un “Mata Hambre”.
Cuando conocía a mi esposo, descubrí que este era uno de sus dulces preferido y decidí aprender a prepararlo. Para mi sorpresa no fue sencillo encontrar una receta. ¿Sería que el pobre dulce había caído tan bajo que había sido desterrado de los libros y de la memoria popular? Luego de una intensa búsqueda logré encontrar una receta que fue un fracaso total. Quedó una masa muy líquida que dio como resultado un bizcocho demasiado esponjoso y la guayaba no se mantuvo en el centro. Como para ser sinceros yo no estaba muy motivada, acepté mi fracaso y no hubo un segundo intento en esa ocasión.
Recientemente mi esposo volvió a mencionar el Masa Real, y esta vez me entusiasmó más el reto. Quizás porque hace ya varios años que no vivimos en Cuba y la nostalgia nos hace apreciar más los platos típicos de nuestra Isla o porque ya está más lejano en mi memoria el sabor repugnante y pegajoso del “Mata Hambre”.
Poco a poco, con las recomendaciones de un amigo repostero, comencé a hace pruebas y luego de cuatro intentos logré dar con la Receta que para mí es definitiva. La espera valió la pena, y quién diría que ahora estoy enamorada de este dulce. Lo he preparado muchas veces y nos encanta para desayunar con un buen café. Lo que hizo que este terminara de robar mi corazón es que mi pequeño de 20 meses ama el Masa Real. Y las mamas me entenderán cuando les digo que es imposible no amar algo que tu bebé ama.
Por todo esto ya este postre es un básico en mi recetario; y cómo no lo va a ser si es muy fácil de preparar, forma parte de mi identidad como cubana y lo más importante hace feliz a mi familia. Espero que disfruten de esta receta tanto como lo hacemos nosotros.
Masa Real de Guayaba
Ingredients
- 4 tazas de harina multipropósito (500 g)
- 1 1/4 tazas azúcar (265 g)
- 3 1/2 barras de mantequilla a temperatura ambiente (395 g)
- 4 huevos
- 4 cucharaditas de polvo de hornear
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de vainilla
- 1 barra de pasta de guayaba (396 g)
Instructions
- Precalentamos el horno a 180 °C o 350 °F y engrasamos con mantequilla el fondo de un molde rectangular de 13 x 9 pulgadas.
- Cortamos la barra de guayaba en porciones bien delgadas.
- Cernimos la harina junto al polvo de hornear y la sal.
- En un recipiente amplio ponemos la mantequilla y con una batidora de mano batimos por 30 segundos para que se suavice, agregamos el azúcar y la vainilla y batimos a temperatura media por unos minutos, hasta que la mezcla se vuelva de un tono más claro y veamos que el azúcar se ha integrado completamente.
- Agregamos los huevos, uno a la vez. Esperaremos a que cada uno se integre completamente antes de agregar el siguiente.
- Añadimos la harina en 4 partes, puede que al final necesitemos aumentar la velocidad de la batidora ya que la mezcla se nos irá haciendo más densa. Nos va a quedar una masa pastosa.
- Agregamos la mitad de la mezcla en el molde que tenemos engrasado y alisamos lo más que podamos con una espátula para que nos quede parejo.
- Cubrimos toda la superficie con láminas de pasta de guayaba.
- Agregamos la segunda mitad de la mezcla y la extendemos y alisamos con una espátula. Esto requiere paciencia ya que al ser tan espesa resulta un poco difícil de manipular.
- Horneamos por 50 minutos o hasta que se haya dorado la superficie.
- Dejamos enfriar por 15 minutos, separamos los bordes con cuidado y volteamos sobre una bandeja.
- Cuando se haya enfriado lo suficiente como para no quemarnos, le damos la vuelta nuevamente para que la parte que quedó hacia arriba cuando lo horneamos vuelva a ser la superficie de nuestro dulce.
- Esperamos a que se enfríe completamente y lo cortamos en 15 porciones. Para que nos queden más parejas retiramos primero los bordes.
Aunque el clásico Masa Real es de Guayaba también podemos prepararlo con Coco. Yo siempre lo relleno con Dulce de Guayaba en barra pero si no lo consiguen pueden hacerlo con Mermelada. Para esto se debe cocer al fuego la mermelada con un poco de maicena para que espese.
Recomiendo esperar a que se enfríe completamente antes de comer ya que la guayaba caliente puede causar quemaduras muy serias. A mi criterio este dulce está mucho más rico al día siguiente.
¿Y ustedes recuerdan el Masa Real cubano? ¿Les trae buenos o malos recuerdos?
Mi postre favorito y esta es la mejor receta que he probado!!!